Hace casi cuatro años, allá por el 2007, me lancé tímidamente al mundo de los blogs con esta entrada Malas madres. Ha pasado el tiempo y el blog se ha ido transformando según crecía mi hija y nacía Teo. Hoy en día existen unas redes muy fuertes de madres blogueras, muchos blogs sobre esta faceta vital tan importante. Yo, como en la vida real, creo que he ido un poco por libre, por falta de tiempo y capacidad para asimilar tanta información y actividad "blogueril", principalmente.
Hoy escribo la despedida. Es posible que con el tiempo abra otro blog, o no, no sé. Me siento muy afortunada por esas casi 400.000 visitas que ha recibido este espacio, que nació con la intención de compartir textos sobre crianza y donde al final he compartido muchos retazos de mi vida y de la de mis hijos. Muchas gracias a todas las personas que lo han seguido y gracias por la oportunidad de conocer a tanta gente tan maravillosa a través de él.
En unos días cerraré definitivamente este espacio, pero quería dejar esta entrada como transición.
Un abrazo,
Maite