Las tardes de verano son largas. Mientras Teo duerme la siesta intento que las actividades sean tranquilas y aprovechamos para jugar al parchís, la oca y llevamos un par de días enganchadas a las perlas Hama, versión Ikea. Las compramos hace tiempo y resultaron ser demasiado pequeñas para la psicomotricidad de Laia. Pero hemos dejado pasar el tiempo y las hemos rescatado. En internet he encontrado un montón de modelos para hacer cosas, como muñecos, animales, personajes de Bob esponja, flores, adornos de navidad... en fin, todo un mundo por descubrir.
A ver si encuentro el tablero cuadrado y ampliamos nuestros horizontes.
Es una buena actividad para trabajar la psicomotricidad fina, la concentración...
En Dideco las he visto más grandes, para que las manos más pequeñas se familiaricen, pero en Ikea sólo tienen un tamaño (eso sí, son mucho más baratas).
En esta entrada se explican muchas cosas de las perlas, con enlaces a flickr, que es una buena fuente de inspiración para las que no tenemos mucha imaginación.